¿Te genera ansiedad tomar decisiones?
¿Tienes un dilema importante a resolver?
Aprende con esta técnica
1ª.- Averigua cuál es tu estilo “de serie” de resolución de problemas:
- Impulsivo: reaccionas enseguida sin pensar en las consecuencias
- Evitativo: postpones la decisión in eternun o delegas en otros
- Racional: planificas tu respuesta al problema
2º.- Si eres “racional”, deja de mirar, esto no te afecta.
Pero si no, sigue estos pasos:
0.- Antes que nada toma estas decisiones:
– Has de cambiar de “paradigma”, es decir, tu forma de ver el problema quizá necesite ser totalmente diferente. Abre tu mente y deja en pausa todo lo que has intentado hasta ahora.
– Has de ser capaz de poner en valor lo que es relevante y descartar lo que no lo es. Todos tus esfuerzos seguro que son útiles porque has aprendido de ellos. Pero ahora toca la creatividad.
– Sin miedo. Si te equivocas, este sistema te lleva a la casilla de salida sin ningún tipo de sentimiento de frustración, culpa o fracaso.
Una vez esto claro, ¡empieza a pensar!
1.- Pregúntate: ¿tu problema tiene solución? Si no, deja de darle vueltas. Si sí, sigue leyendo:
2.- Define tu problema respondiendo a estas preguntas:
– Cómo ha surgido el problema. Por ej.: con el tiempo, nos hemos distanciado, los problemas familiares nos han afectado como pareja.
– Qué quieres conseguir exactamente. Por ej.: volver a tener feeling con mi pareja
– Por qué quieres resolverlo. Por ej.: porque quiero a la familia unida y volver a sentir algo con mi pareja
– Cómo será cuando se resuelva. Por ej.: me sentiré a gusto en su compañía. Confiaré.
– Dónde está afectando este problema exactamente. Por ej.: en la educación de mis hijos.
– Quién más está afectado. Ej.: familia extensa, hijos…
– Cuándo necesito que se resuelva. Ej.: antes de que la situación sea insostenible.
3.- Buscando soluciones a lo loco:
Haz una lluvia de ideas de todo lo que se te ocurra, por descabellado que parezca.
Por ej.: separarme ya, hablar con mi suegra, preguntarles a los niños, perdonarlo todo y partir de cero, pedir perón por lo que yo haya hecho, sentarnos a hablar sin rencores, ir a terapia de pareja…
4.- Analiza las consecuencias.
Para cada solución propuesta, responde:
¿Realmente es posible hacerlo?
¿Qué costes tendrá a nivel personal, económico, familiar…?
¿Realmente quieres hacer eso?
5.- Elige la mejor opción.
Tras analizar los pros y contras de las soluciones planteadas y eliminar las no válidas, elige una.
Por ej.: vamos a ir a terapia de pareja
5.- Pasa a la acción.
Planifica los pasos a seguir para lograr la solución elegida.
Por ej.: buscar la mejor opción de terapia en nuestra zona, buscar alguien que esté muy disponible para que la terapia sea intensa, pedir presupuesto y elegir la mejor opción dadas nuestras circunstancias actuales…
6.- Revisa los resultados y vuelve a empezar.
Por ej.: si a la tercera sesión de terapia, no vemos que avancemos, buscamos otras opciones.
Y empieza el proceso de nuevo.
#ungestocambiatuvida
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